lunes, 21 de junio de 2010

A ti y a Dios me debo.

Ninguna canción o poema logrará jamás
expresar el amor que tengo por ti,
porque entre tus brazos y besos encontré
el arrullo que necesitaba mi vida.

Innumerables noches me acompañaste,
susurraste a mi oído tantos consejos de vida,
con tus amorosas caricias curaste raspones y heridas
y con una comprensión infinita siempre supiste
como guiar me temprana necedad e inquietud.

Mis travesuras inocentes y rebeldías las controlaste
con tanta sabiduría, como si Dios hubiera puesto
en tus manos un manual para ser Madre.

Por tanto amor, confianza y apoyo hoy te dedico
mi vida, mis logros y mis éxitos, a ti y a Dios me debo.

Te amo mamita linda.

2 comentarios: